jueves, 24 de diciembre de 2009
Mi vida
Que fina es la línea entre la locura y la realidad y tan fina es que nadie puede decirme si la realidad es una locura o si la locura es la propia realidad. A medida que pasan los años me vuelvo un poco miope y no puedo ver esa delgada línea imaginaria que separa las cosas intangibles e inseparables, y por eso voy viviendo un poco de todo, un poco de las dos. Ya no se lo que es mi vida pero me gusta asi
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Supongo que es la gracia del asunto... Si los límites entre la locura y la realidad estuviesen claros, creo que sería difícil acercarse a la locura ya que todos estaríamos del lado seguro, del lado de la cordura. Sólo algunos pocos se animarían a cruzar esa línea y no tendrían seguro el regreso de ella.
ResponderEliminarPor suerte nada es claro y a esta altura casi no existen límites... No vale la pena tenerlos.