sábado, 19 de septiembre de 2009

Sueños y otras cosas......

Lo más hermoso de este planeta es la diversidad de cosas casi idénticas que podemos encontrar. Me atrevo a decir que es igual con los sueños. Una vez leí que la relatividad lo era todo y estoy un poco de acuerdo con eso, aunque no creo que sea necesaria para construir un puente. Me río un poco de la ciencia porque me gusta reírme, es que a veces suena gracioso todo eso. Los sueños son un espejo que refleja algún aspecto de la vida, un escenario para ensayar posibilidades de expresión externas, una ventana de oportunidad para el auto conocimiento. Un sueño es cualquier anhelo o ilusión que moviliza a una persona, este es al que me refiero. Hipnos no tiene un lugar en esta historia.

Pero lo que insinúo es que muchas personas tienen diferentes sueño y lo mas curioso es que son igual de importantes, Algunas personas sueñan con tener una casa de fin de semana, mientras otras personas solo peden soñar con poder comer hoy, porque es lo único que anhelan, porque es lo único que pueden pensar, porque alguien les arrebato ese derecho a soñar y los culpables somos todos, de creernos iguales cuando no lo somos. Que difícil se me hace “ser” en un lugar tan real que no da cuenta de que existo. Cuestiono el Critón de Platón donde da varias opciones; te vas a otro lugar si no te gusta tu entorno, te quedas y te adaptas o te quedas y tratas de persuadir las leyes. En la práctica, mi solución actual es pobre, pues se limitar a no hacer nada. Es decir, no hago aquello en lo que creo con tal de no hacer aquello en lo que no creo, Es una especie de frustración o parálisis de mis capacidades que evidentemente desemboca en problemas existenciales. Para Sócrates hacer lo justo era primordial y prefería morir a cometer un acto injusto como sería huir. Yo no lo juzgo porque no me interesa juzgar. Una moneda no soluciona el problema. El Critón habla de justicia. Todo es relativo, “eso dicen”.

Me empeño en tener más de un sueño, no es algo muy fácil porque a veces hay que elegir, la realidad de a poco te absorbe y hasta el más soñador cae de rodillas. Eh visto varios de mis sueños ardiendo a fuego lento pero vigoroso y compacto, me dolía en las entrañas verlos desaparecer, nunca había visto nada igual, se escuchaba un quejido que acompañaba el adiós de varios años de mi vida, era algo ostensible, palpable, casi como sentir las aleaciones de hierro fundiéndose a una temperatura que solo ellas podrían pero en este caso no parecía hierro, parecía algo mas simple, mas débil, algo como la carne a esa temperatura. Con ellos se moría una parte de mí. Ahora me encuentro solo tratando de sobrevivir pero mi voluntad me abandona, simplemente se olvida de mi, Nunca pensé ser tan débil nunca pensé que esto me pasaría. Estoy agotado, mis últimos hilos de conciencia dicen que me libere, es algo parecido a una marioneta pero sin cuerdas, yo diría que es mi cuerpo pero ahí no estoy yo, yo estoy fuera. Me aseguro de que no estoy muriendo, dicen que los que van a morir lo saben de antemano, yo también lo se porque todo los que escribo se basa en alguna experiencia de vida aunque no fue a mi al que le toco. Que generosa que es la muerte, que injusta que es la vida, que repugnante que es la impotencia y que bonito es saber que estoy vivo. Miro hacia atrás y se que no fui perfecto, tuve muchos mas defectos de los que creo haber tenido, de eso se trata todo esto. La única manera de resistir esto es reemplazando un sueño con otro. Suena algo elemental e ingenuo porque algunos creen que los sueños no son reemplazables, yo pienso que si, que mientras el nuevo sueño sea totalmente deseado, el viejo es reemplazado.


Vuelvo a ese viaje intenso que mi cabeza viene recorriendo hace varios minutos, quizá horas, es que no me doy cuenta del tiempo, también suena placentero y nunca me inyectaron morfina pero creo que la sensación es igual. ¿Dije morfina? Esta bien, siempre me equivoco cuando se trata de esas palabras, muchas veces me la confundo con penicilina. Ya es hora de volver a la realidad para poder poner en práctica todo lo que aprendí, la decepción ya es un sentimiento común porque ningún modelo de sociedad actual se asemeja a lo que estoy pensando, a un ser manejado por sus valores, con una ética y una moral no manipulable y con un ser por sobre todo que haya tomado una conciencia social totalmente superior a la actual y donde se rige por otras leyes, por “leyes perfectas” que no dejan de lado al que se siente atraído por la tentación del alma. No me siento solo, la locura es una enfermedad social. Ni Rivotrill, ni Clonazepam. A veces si me siento solo, a veces si me da miedo desaparecer.

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